el buen terrorista

tantas palabras que no dicen nada
tantas cosas dando vueltas pero pocas que atraviesan
subir el volumen
gritar
cerrar los ojos y llorar para adentro
esperar
eternamente tal vez
y leer
que todas esas palabras llenen los huecos
tapen cicatrices
y apaguen la mente
ser para adentro y guardar miles de palabras
que algín día
tal vez
digan algo.

una sonrisa de domingo

no puedo probarme una prenda más, no puedo tomar una pastilla más
si duermo de día, entonces soñaré de noche
así es, dejo el esqueleto sin armar.

puedo pegar infinitas frases en la pared, aunque los colores son limitados
me invitan a sentarme, a opinar en silencio, a escuchar.
una trompeta, un oboe y una guitarrita

necesito una noche
solo una
y una sonrisa, que me despierte con el desayuno
como el último domingo